Las fiestas navideñas han sido muy duras. Demasiadas celebraciones y comidas familiares que pasan factura a todos. Incluso a las señales, como la que muestra la imagen, que parece necesitar un reparador descanso antes de volver a su responsabilidad habitual de regular el tráfico en el cruce de la carretera de Santa Ana con el camino viejo de Pozo Estrecho.